Elżbieta Drążkiewicz – Lección de supervivencia 164

De manera virtual se ha fortalecido la crítica tajante a quienes son parte de grupos sociales alejados de las tendencias mediáticas, muchas de ellas viene de especialistas, analistas, catedráticos y científicos; cuando esto ocurre empieza a germinar o a fortalecerse las teorías de la conspiración. A esto se suma la pérdida de confianza en la institucionalidad.

El contexto, entonces, cae en el campo del especialismo, con lo que deja por fuera toda clase de opinión que pudiera venir de quien no está en un determinado círculo que no es tendencia. Por tanto, es siempre oportuno leer desde distintos ángulos las argumentaciones de «los expertos» y sus seguidores. El objetivo de esa búsqueda encontrar esta característica.

En su artículo asegura: «Permítanme ser clara: de ninguna manera estoy argumentando que las teorías de conspiración son inofensivas. Es precisamente porque son tan peligrosas que es crucial entender sus causas. No es suficiente estudiar a los individuos y sus ideas: debemos considerar las estructuras sociales y los contextos culturales e históricos que generan y propagan ideas conspirativas.

La publicación se titula Study conspiracy theories with compassion: Las fuerzas sociales que impulsan a las personas a unirse a un sistema de creencias importan más que los detalles de lo que creen.

Gracias amable lector por su tiempo para visitar mi blog y a la espera que estas pocas palabras le sean de utilidad, me permito poner a su consideración otras entradas relacionadas con mi profesión: el periodismo.

@Zavala_Ra

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